La verdad debería ser la carta de presentación y el arma de cualquier persona, pues si todos de entrada a cualquier relación nos presentáramos y "defendiéramos" con la misma, todo funcionaria mucho mejor; el mundo estaría lleno de conversaciones sinceras lo que indudablemente conllevaría a tener un menor número de malentendidos.
Pero no nos gusta la verdad, y acá nuevamente el maldito ego juega un papel importante, porque nunca queremos escuchar en que estamos fallando o en que podemos mejorar; vamos por la vida justificando nuestros actos y errores con cuanta excusa chimba se nos venga a la cabeza y parece que nos diera pánico hacernos responsables de nuestros actos.
Lo importante, creo yo, esta en saber administrar y manejar la verdad, pues debemos tener mucho tacto al tener que informar al otro sobre la misma y estar plenamente seguros de que si estamos en lo correcto.
So
I wasn’t lying exactly. I was just
choosing among truths.
- The Fault in our stars -