Siempre he creído que los lugares, épocas, situaciones oscuras, son terreno fértil para la creación, independiente del campo en el que se trabaje.
El escritor Juan Manuel Silva contaba que gran parte de su novela "Besos, mordiscos", la escribió en un periodo el que estuvo enfermo. Varios días en los que tuvo una fiebre muy alta, le sirvieron para escribir y planear su novela.
Tal vez, el mejor ejemplo lo ha dado Kafka, que no dormía, y el privarse de sueño le servía para hacer conexiones forzadas. Alguna vez dijo que para poder escribir, lo importante era apartarse, recluirse en algún lugar:
"Escribir, en este sentido, es como un sueño mayor que la muerte"
- Franz Kafka -
Todos queremos estar bien, pero a veces sobrevaloramos esos estados plenos y felices, y tratamos de esconder las angustias y todo lo que nos hace sentir mal. Cada quien es libre de mostrarse al mundo como se le de la gana. Con toda la vulnerabilidad posible o una fachada completamente falsa.
Lo que creo necesario es que no deberíamos dejar de lado aquellas ocasiones en las que una nube negra nos acompaña. Delirar es morir un poco y un estado que todos deberíamos experimentar alguna vez.
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