Cada capítulo habla sobre una novela que la marco por algún motivo, pero lo que me ha gustado es que muchas no son los grandes clásicos, sino novelas de las que uno nunca se enteraría de su existencia si no es por este tipo de libros.
Me gusta leer a escritores que escriben sobre otros escritores. Imagino que eso se debe a que siempre ando en búsqueda de recomendaciones de libros, así tenga muchos en cola de lectura. Ese, creo, es otro deporte de las personas a las que les gusta leer, anotar o intentar grabarse en la cabeza cuanto título nuevo les llame la atención.
Recuerdo que en pleno auge de la pandemia asistí a una charla virtual que trataba sobre Borges, su obra y detalles de su vida. El escritor que la daba contó, por ejemplo, que en sus últimos años de vida estaba casi ciego, y como no podía leer bien, una vez se aprendió de memoría un discurso que debía dar. A mí me gusta conocer ese tipo datos curiosos sobre los escritores y así lo mencioné en un grupo de WhatsApp en el que hay algunos extranjeros. Una mujer inglesa me dijo de frente que le parecían una perdedera de tiempo esas charlas en las que un escritor habla sobre otro.
A mí me parecen todo lo contrario y siempre estoy dispuesto a escuchar historias sobre escritores. Esa señora siempre me pareció extraña porque en los Hay Festival, por ejemplo, prefiere ir a charlas de académicos y políticos, en vez de escritores de literatura, pero bueno, cada quien con sus gustos ¿acaso no?
Me gusta leer a escritores que escriben sobre otros escritores. Imagino que eso se debe a que siempre ando en búsqueda de recomendaciones de libros, así tenga muchos en cola de lectura. Ese, creo, es otro deporte de las personas a las que les gusta leer, anotar o intentar grabarse en la cabeza cuanto título nuevo les llame la atención.
Recuerdo que en pleno auge de la pandemia asistí a una charla virtual que trataba sobre Borges, su obra y detalles de su vida. El escritor que la daba contó, por ejemplo, que en sus últimos años de vida estaba casi ciego, y como no podía leer bien, una vez se aprendió de memoría un discurso que debía dar. A mí me gusta conocer ese tipo datos curiosos sobre los escritores y así lo mencioné en un grupo de WhatsApp en el que hay algunos extranjeros. Una mujer inglesa me dijo de frente que le parecían una perdedera de tiempo esas charlas en las que un escritor habla sobre otro.
A mí me parecen todo lo contrario y siempre estoy dispuesto a escuchar historias sobre escritores. Esa señora siempre me pareció extraña porque en los Hay Festival, por ejemplo, prefiere ir a charlas de académicos y políticos, en vez de escritores de literatura, pero bueno, cada quien con sus gustos ¿acaso no?
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Un comentario a $300 dos en $500