En la novela que leo un bebe de pocos meses sufre un accidente, se golpea la cabeza y queda maltrecho por el resto de su vida.
Recuerdo el accidente en el que me golpeé la cabeza, pasé 17 días en coma, y que me dejó el amable recordatorio. No quedé como el personaje de la novela, aunque intuyo que el episodio me dejó ciertos rayes.
Nunca voy a recordar cómo ocurrió, porque mi mente sumergió ese episodio en sus profundidades para que nunca se asome a la superficie de la consciencia. Amnesia postraumática le llaman a ese mecanismo de defensa.
Tiempo después me enteré de que mi hermana mayor llevó una especie de diario durante el tiempo que estuve en cuidados intensivos. En él a modo, supongo, de terapia, para asimilar lo que estaba pasando, se dirigía a mí y me narraba cosas que le pasaban en su día a día o lo que los médicos decían de mi estado: Hoy moviste un dedo cuando te hablaron, paso x o y cosa en el mundo, en mi trabajo etc. lo que fuera. Como cuando llegaba a la casa después del trabajo y cruzábamos un par de palabras. No sé, por ejemplo si todas sus notas eran positivas o si también anoto lo que decían otros médicos: tiene 50% de probabilidad de vivir o morir. No sé si lo decían así tan de frente pero tengo entendido que de alguna manera lo daban a entender.
Tampoco sé si esas hojas existen todavía, pero me gustaría leerlas, saber qué fue de mí en esos 17 días de inconsciencia profunda.