jueves, 10 de octubre de 2013

Frases

A veces cuando voy caminando me gusta "agarrar" frases de las conversaciones de las personas, para después imaginarme  historias en mi cabeza o en otras ocasiones las frases simplemente  me hacen reír;  recuerde usted, estimado lector, que me divierto con muy poco.

Todos los días voy a servirme café al piso de arriba, porque en mi piso no hay horno microondas; y a mi me gusta el café en ese punto de vapor sobrecalentado, donde solamente los últimos sorbos de la taza ya no sean calientes.

Pues bien salía hoy con mi pocillo y en los ascensores me encontré con la siguiente frase repartida en un combo de preguntas "¿Tiene la cabeza buena?... ¿Quiere que se la rompa?" le contaba de forma indignada un hombre a una mujer, es decir, no vaya a creer usted que le estaba haciendo las preguntas a la mujer. 

 No alcancé a oír las palabras previas a las preguntas, pero tuve claro que el hombre le estaba contando eso a su amiga. Me imagino dos cosas entonces, que la mujer era su amiga y que la situación era esa porque me pareció muy alzado preguntarle a una vieja algo así, claro está que hay algunos que afirman que hay viejas que les gustan que las traten mal y bla bla bla, pero eso es tema de otro escrito.

Volviendo a las preguntas, estas son totalmente ofensivas; la primera insinua que uno es un brutazo de primera y en la segunda el odio y la rabia y las ganas de cascar a una persona se hacen evidentes. 

La próxima semana voy a dedicarme todo el día a "agarrar" frases de diferentes conversaciones para después unirlas a ver que sale.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Comunicación

Se supone que en esta época disponemos de diferentes medios para comunicarnos: E-Mail, teléfono (fijo, celular), skype, what's app, señales de humo, a grito herido, etc. me imagino que también existirán los gritos saludables o en perfecto estado, pero vaya usted a saber como se diferencian los unos de los otros.

A pesar de nuestros grandes avances tecnológicos, perece que todavía no logramos comunicarnos o tal vez lo hacemos pero no somos capaces de expresar  que es lo que realmente queremos y mucho menos cuando necesitamos algo puntual.

Esto nos tiene jodidos. La buena comunicación; esa que es clara, concisa y que va directo al grano, es otra de las tantas cosas que le hacen falta a las personas que habitamos este planeta. 

Usted debe ser el único que debe saber negociar su comunicación, es decir, debe darse cuenta de como "comercializar" la misma.  Resulta indispensable detectar las necesidades de comunicación de su mercado, bien sea a nivel negocio o personal, y saber comunicar algo cuando lo crea necesario in,dependiente de que quiera dar o recibir.

El que no habla pierde.


martes, 8 de octubre de 2013

Perder la cabeza

Se subió al ascensor de su edificio en el piso 50, siempre le habían gustado las alturas, y se encontró con la cabeza de una persona.  Parecía que estuviera durmiendo; por lo menos se veía más tranquila que la de él en ese momento, con miles de pensamientos en desorden que lo atacaban.

En el piso 26 se subió una señora que después de mirar la cabeza degollada en el piso le preguntó "¿es que usted ha perdido la cabeza?" "No señora  en medio de lo disfuncional que puede llegar a ser, al parecer sigue funcionando".  La señora abandonó el ascensor en el piso 15; dicen los rumores que en el mismo tiene un amante, "un señor con la cabeza grande" aseguran unos, y otros dicen sarcásticamente "debe tener otras cosas grandes", y después rien como niños chiquitos.

Durante todo el recorrido del ascensor evito mirar la cabeza y el charco de sangre que la rodeaba, desde un comienzo supo que era la suya, y por tal razón le dio la espalda al espejo pues tenía miedo de mirar cual era la cabeza que llevaba puesta.

Al abrirse las puertas del ascensor en el primer piso, dos policías lo agarraron y lo estamparon contra una pared mientras le tomaban los brazos para ponerle las esposas;  "!díganos de quién es esa cabeza, asesino!" exclamó uno de los policías.  "Es la mía respondió; tímida pero a la vez agitadamente" "Entonces póngasela y deje de fingir ser otra persona" anotó  el otro agente.

Se agacho tomó su cabeza que había extraviado a propósito hace unos meses, y subió por  las escaleras pensando en como no volver a perderla nunca más.

lunes, 7 de octubre de 2013

Emoción

Yo soy flojo para ver televisión, es decir, sigo una que otra serie y ya; pero de esas que son cada año. En ocasiones prendo el televisor y doy con unos programas buenos sin querer.  Este fin de semana que paso dí con un programa sobre noticias de cultura en Europa.  En el mismo una vieja estaba hablando en Alemán y por eso fue que me quede viéndolo, pues aunque entiendo e muy poco el idioma, logro de vez en cuando captar el contexto del tema sobre el que están hablando; además  fonéticamente me cautiva.

El programa estaba doblado al español. Esto  es bueno pues me permite practicarlo en el sentido en que me  esfuerzo en ponerle una mayor  atención al alemán y voy rectificando con el español si entendí o no bien, pero bueno basta de introducciones.

La vieja que estaba hablando en Alemán era una compositora Turca de música clásica y estaba explicando como en estos tiempos donde respiramos tecnología ella continuaba componiendo sus obras en su cabeza por completo, sin la ayuda de ningún programa computarizado.  Entonces la única opción de escuchar su creación era cuando una orquesta las tocaba por primera vez.

Algo interesante, es que la señora nuevamente volvió a tener contacto con Turquía después de mucho tiempo, por medio de una obra que había compuesto  para que la interpretara una filarmónica de su país.

La señora al  escuchar su obra por primera, no pudo evitar la emoción y se puso a llorar; me imagino que de la alegría de oír su hermosa creación y también por haberse reencontrado con su país de esa forma después de muchos años.

Ojalá yo pudiera vivir una experiencia parecida a esa.  Me refiero a que  que algo de lo que haga, me emocione hasta el punto de llorar.  Creo que la emoción es algo que definitivamente nos hace falta. deberíamos dejar de de vivir como robots y ponerle emoción a lo que sea que hagamos.

viernes, 4 de octubre de 2013

Horarios

Otra de las tantas frases sonsas que solemos utilizar y que tenemos rayada en las paredes de nuestras cabezas es "al que madruga Dios le ayuda". No creo que esté científicamente comprobado que aquel ser o ente todopoderoso en el cual cada uno confía, ayude cuando se madruga. Por otro lado ¿quien ayuda a los que no creen en Dios?

Yo he tenido tanto días perros como días buenos cuando madrugo y de igual forma cuando me he despertado tarde. Imagínese no más la siguiente situación estimado lector: si un sicario madruga el día en que va a matar a una persona y cumple con éxito su cometido ¿entonces Dios lo ayudo?, la frase definitivamente se hace zancadilla por si sola.

Lo que si considero que está claro es que uno por las mañanas; diga usted las primeras 6-7 horas después de levantarse, está mas fresco y "agarra" la información que día a día le bombardea el mundo (personas, medios, más allá y más acá) mucho más fácil. 

Sigo sin entender quien fue el desalmado que se invento las clases justo después del almuerzo; uno a esa hora solo quiere cerrar los ojos por unos minutos y si es posible entrar en un profundo sueño de no más de 15 minutos. He conocido varias personas que afirman tener dicha habilidad; yo creo que solo chicanean porque lo más probable es que uno siga derecho. 

Pero bueno, cada cual tendrá sus horarios para practicar su tumbao personal de la mejor manera que le parezca, el punto radica en que algunos funcionarán mejor levantándose temprano y otros tarde. Yo creo que el equilibrio de horario mundial se encuentra en la diferencia horaria entre los países y en esas horas que pierden o ganan las personas trasportándose de un lado al otro, de ahí la importancia del Jetlag.

jueves, 3 de octubre de 2013

Robar Carros

A los gringos les gusta el show, el espectáculo, transmitir todo en vivo y en directo. Parece que gozan con el sufrimiento humano; pero bueno no le echemos solo la culpa a los gringos a la larga a veces todos nos comportamos así.

Hay un programa de televisión donde dejan un carro con las llaves puestas y las puertas sin seguro, esperando que cualquier cristiano que suele apropiarse de lo ajeno, vea semejante papayazo y decida robarse el carro.

Lo que esta persona no sabe es que mientras se decide en si cometer o no el acto delictivo, durante todo el lapso de tiempo que se sube al carro, abre la guantera, lo prende, etc. lo están filmando.

Finalmente la persona arranca a andar en el carro feliz, celebrando su fácil hurto; cuando de repente le apagan el motor por medio de un radio teléfono de larga distancia.

El ladrón claramente no entiende nada de lo que está pasando y en medio de su extraña situación, le caen encima varias patrullas de policía y le empiezan a preguntar que de donde saco el carro, que si es suyo, y miles de preguntas las cuales saben que cualquier cosa que responda, va ser una vil mentira.

Leí hace poco una noticia donde en una situación similar le echaban encima al ladrón una sustancia que lo delataba y  hacía ver fácilmente en la noche.  En esta afirmaban que el fin de dicha parafernalia es disminuir el robo de carros, que eso de cierta forma va a educar a las personas para que decidan no robar ¿en serio va a ocurrir eso? 

Pienso entonces que tendríamos que hacer lo mismo para todos los otros tipos de delincuencia, por ejemplo, poner una mujer en un sitio de alto peligro en la ciudad y esperar a que la manoseen, para así atrapar a los violadores; o quitarle todo tipo de seguridad a una institución financiera para que un grupo de asaltantes pueda robar libremente y después agarrarlos con las manos en el botin, y así para infinidad de situaciones.

No se, me parece que algo en dicho sistema está fallando. no creo que sea la forma adecuada para reducir la delincuencia; de todas formas tampoco tengo la respuesta ni un modelo para proponer, solo quería, como siempre, compartirle un par de palabras.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Tom Clancy

Nunca he leído, lastimosamente, ningún libro de Tom Clancy, pero lo conozco por los juegos de Video "Splinter Cell" que ayudo a crear junto a Ubisoft; los cuales, fácilmente, se pelean contra Gears of War  el primer puesto como juego favorito. 

Clancy, hasta donde tengo entendido,  siempre se dedicó a la novela de espias y conflictos bélicos.  Si no compró uno de sus libros en lo que queda de este año, es un insulto a su memoria.

Siempre que algún escritor muere siento algo de nostalgia; así nunca haya leído alguna obra del mismo; simplemente me  basta con saber que alguien dedicó su vida entera a las letras, para saber lo mucho que todos perdimos con su partida.  Larga vida a todas las obras de Clancy.