Hoy mientras me tomaba un café, paso de largo una familia con 5 hijos todos pequeños y de edades cercanas, lo que me hizo pensar que la mama, la cual paso de última con el más pequeño de todos cogido de la mano, tuvo una gestación y "producción" en serie de sus hijos. También me sorprendió ver una familia tan numerosa en estos tiempos oscuros de la humanidad.
A estas alturas de mí partido creo que no voy a tener hijos, posición para la cual tengo varios argumentos propios, los cuales me da pereza exponerlos acá, siendo el que no hay en estos momentos de mi vida "contra quien" tenerlos, el principal.
Tener un hijo cuesta mucho, tanto a nivel emocional como económico. Hace varios años, póngale más de 6, leí un artículo que decía que la inversión monetaria en un hijo más o menos salía en 120 millones de pesos, con educación básica(jardín y colegio), universitaria y un intercambio. Supongamos que hoy dicha cifra vaya en 200 millones, en dicho orden de ideas lo papas de esta familia tendrán que desembolsarse la medio pendejadita de 1000 millones de pesos para sacar a sus hijos adelante (¿adelante de quien?).
Ahora bien, la escena de esta familia desayunando también me hizo recordar el libro "La república del Vino" de Mo Yan, en el cual el inspector Ding Gou'er (vaya usted a saber como se pronuncia ese apellido) investiga un caso de canibalismo, donde al parecer los dirigentes de un partido comen niños. En un aparte del libro cuentan como los padres tenían niños, los cuidaban y alimentaban bien, para después venderlos (por favor, tenga en cuenta que esto que le estoy contando es mera ficción, estimado lector).