lunes, 29 de febrero de 2016

Hanami

En español no hay palabras que signifiquen algo más grande que su propio significado, es decir que encierren una acción concreta.   ¿Y los verbos? se preguntará usted, estimado lector, es obvio que estos encierran acciones, pero, como decirlo, quizás a su definición les  hace falta carne emocional.

Los Japoneses, o su lenguaje más bien, nos lleva años luz en ese aspecto.  Hoy, mientras buscaba unos ejemplos para una presentación, di con la palabra Hanami.  Me encantan y creo que hay algo mágico en  esos encuentros fortuitos con cosas que uno no sabe y que de repente captan toda nuestra atención. 

Hanami  significa, a grandes rasgos, Mirar las flores, y era antes  una costumbre ancestral reservada para la corte imperial.  Lo primero que me pregunté fue , ¿y para qué carajos quiere uno mirar flores?  ¿no hay acaso cosas más importantes que hacer? qué se yo: trabajar, estudiar, sobrevivir, etc. pero luego me pregunté ¿y por qué no? Me imagine entonces mirando una flor púrpura, color que suprime el apetito,calma los dolores de cabeza y fomenta la creatividad,  en un parque rodeado por montañas, con  pasto perfectamente cortado de color verde intenso.

La imagen me relajó.  Espero algún día poder visitar Okinawa y practicar el sencillo arte del Hanami.  

Tal vez es por eso que la comunidad más longeva del mundo se encuentra allá, por qué tienen claro a qué actividades se les debe dedicar tiempo. 

Por otro lado los okinawenses  no tienen una palabra equivalente a "Jubilación"; en cambio cuentan con la palabra ikigai que se traduce como: La razón por la que te levantas en las mañanas".

No cabe duda que ambas cosas nos hacen falta, practicar el Hanami y dedicarle más tiempo a la búsqueda de nuestro ikigai. Nunca es tarde para comenzar. 

jueves, 25 de febrero de 2016

Soledad

"Hola Soledad 
no me extraña tu presencia 
casi siempre estas conmigo, te saluda un viejo amigo 
que te encuentres uno mas"
- Hola Soledad -

No conocía esa canción hasta una prueba de sonido , en un concierto de las 1280 almas.  El cantante del grupo telonero, lamento no recordar cómo se llamaba, un hombre grande que llevaba un sombrero negro y una pinta que parecía de los años 50 probó el sonido cantando unas estrofas de esa canción.

Hace poco una mujer me dijo que le gustaba experimentar momentos de  soledad.  ¿Por qué, muchas veces, vemos a la soledad como algo negativo?  ¿Cuál es el afán de andar siempre rodeados de personas? además  ¿Significa la soledad únicamente no estar en compañia de lguien?, la verdad no lo creo.  Deberíamos apreciar más la soledad, pues  es tremendamente importante para pensar quienes somos y a qué le apostamos en la vida. 

"I sometimes think the test is not so much talent, which is not as rare
 as people think, but purpose or vocation, which manifests in part as 
the ability to endure a lot of  solitude and keep working."
- The Faraway Nearby - 

miércoles, 24 de febrero de 2016

Supervivencia

Así nos la pasamos, en medio de una guerra con un fusil al hombro, tratando de esquivar balas y de incrustarle alguna,entre ceja y ceja, a otro hombre,  sentados ocho horas en un cubículo de oficina o de cualquier otra manera.

Hagamos lo que hagamos, por más brillantes que creamos ser, simple y llanamente sobrevivimos,  pues nunca somos conscientes de la cantidad de información que atropella nuestro cerebro, y las miles de decisiones que este toma sin consultarnos.

Lisa Cron cuenta en su libro Wired for Story  que el cerebro, nuestro procesador natural, siempre le busca significado a cualquier evento que acontece en nuestras vidas, y subraya lo que considera importante para sobrevivir; en base a eso, revisa todos los recuerdos que tenemos almacenados y nos cuenta una historia acerca de como nos sentimos o deberíamos sentirnos con relación a la experiencia que estamos viviendo y de como esta  podría llegar a afectarnos.

A duras penas sobrevivimos y el cerebro nos hace dar tumbos por ahí, en una especie de piloto automático.

 

martes, 23 de febrero de 2016

Blasfemia literaria

Hace poco murieron Harper Lee, autora de la novela Matar a un Ruiseñor y Umberto Eco, autor del Péndulo de Focault.  Varias personas afirman que son escritores que debemos leer obligtoriamente.

Yo no he leído nada de los dos, ¡que Blasfemia! dirán algunos.  La novela de Harper Lee, siempre la he tenido en la mira y ha revoloteado constantemente en mí panorama de lectura, pero de repente se me cruzan libros, que sin ser clásicos o lecturas "obligatorias" (que como ya lo he dicho no existen), me ocupan.

Una vez el amigo de un amigo me hablo sobre el péndulo de Focault y me dijo que es un libro tremendo, que tenía que sí o sí leerlo.  En esa ocasión no me deje tentar del destino y seguí sus indicaciones.  Me conseguí una edición sencilla que me costo $25.000 y comencé a leerlo.  Le juro, estimado lector, que intenté terminarlo ( muy pocos son los libros que he dejado a medias) pero alrededor de la página 700 no pude leer más.  La historia nunca me engancho, y no sé exactamente por qué; quizás le tenía mucha expectativa a la novela y al final eso termino por matar mis ganas de lectura.

Hace poco una amiga me sugirió leer El nombre de la Rosa, tal vez haga el intento este año.   Mientras tanto seguiré por ahí a ver si la vida, el destino, el dios de los libros o de las letras, me cruza un libro de esos autores en mi camino. 

lunes, 22 de febrero de 2016

Somos voyeristas

Todos lo somos.  Todos disfrutamos contemplar aspectos privados de la vida de otras personas.  Ayer di con el blog de Cynthia, una mujer que vive en Estados Unidos, en el cual relata detalladamente pormenores de su vida y su trabajo.

Leí una entrada y me enganché no sólo porque escribe bien, sino también al  poder ser, como lector,  cómplice de sus aciertos, embarradas, alegrías tristezas, porque eso logran los buenos escritos, generar empatía y conexión entre los lectores y sus personajes.

Sólo imagínese a cualquier persona estimado lector; seamos más precisos y digamos que es alguien que de una u otra forma le interesa o le llama la atención, por envidia, porque le gusta, o porque no tiene ningún tipo de contacto con esa persona y desearía saber algo acerca de cualquier aspecto de su vida,  ¿Quién no aprovecharía la oportunidad, si se llegara a tener, de espiar esa vida como por el ojo de una cerradura? que lance el primer argumento quien diga que no.

jueves, 18 de febrero de 2016

La rabia nos mueve

Your anger is a gift” susurra dos veces Zack de la Rocha en la canción Freedom de Rage against the Machine. Parece que los bogotanos actuamos bajo esa indicación y vamos regalando rabia a cada rato.



Hoy tomé un taxi. El señor que iba al volante, llevaba una camisa de manga corta a cuadros azules. Usaba gafas,tenía poco pelo y cara apacible.

La escena, la misma de todo los días: Mucho calor y sol , carros por todos lados, en resumen trancón, una constante en Bogotá. Ser taxista no debe ser fácil, aguantarse día tras día el mismo panorama es una ruta segura para desarrollar conductas agresivas; pero en medio de todo el taxista parecía tener una actitud zen y bonachona.

En medio de mi divagación, el taxista había puesto la direccional para pasarse al carril de la izquierda. En esas un demente que iba manejando una 4x4 pasó por la derecha y le gritó "¡IDIOTA!" a todo pulmón. Está claro que no es un insulto muy grave, pero la forma en que pronunció la palabra dejaba ver toda la rabia contenida en ella. 

El taxista, resignado, se respondió su monólogo interno en voz alta “¿Idiota porque pongo la direccional para cambiarme de carril?. No dije nada.

Mientras sigamos manejando esos altos índices de rabia en la calle como conductores o peatones, y si eso es lo único que nos mueve, no habrá Metro, ni Petro ni Peñalosa que mejoren la movilidad en este pueblo grande.

miércoles, 17 de febrero de 2016

Didier Six

Didie Six  podría ser el nombre de un cantante de Regaetton pero no, es el nombre de un ex-futbolista Francés.   ¿Qué como sé eso? Mi hermano es una enciclopedia ambulante de ese deporte y una vez, hace muchos años, en una de sus tantas charlas y/o discusiones sobre ese deporte con mi papá, lo mencionó.

Yo estaba muy pequeño y poco o nada me interesaba el fútbol, pero el  nombre de ese jugador se me quedo grabado en la cabeza para siempre, imagino que por su sonoridad, o alguna otra razón, nunca entenderemos realmente como funciona la cabeza.

 ¿Por qué atesoramos cierta información y otra simplemente pasa desapercibida para nuestro cerebro? En el colegio, en bachillerato, nos dio clase de español Ximena.  Tengo completamente intacto el recuerdo  de aquella clase donde aprendimos la escritura correcta de a través.  "Acuérdense que es separado y con tilde" nos dijo, y cada vez que utilizo el par de palabras en un escrito me acuerdo de ella y esa clase, y me parece inconcebible encontrarme la palabra escrita de diferentes formas: atraves, a travéz, etc. mucho más que toda la indignación que causa la confusión que todavía muchos tienen con   ay, ahí y hay, en fin.

El cerebro debe guardar  ciertas frases, palabras, momentos o instantes porque de pronto algún día, uno de esos datos nos salvará la vida quien sabe de que manera.

martes, 16 de febrero de 2016

El innovador fastidioso

Hace un tiempo leí un artículo que habla sobre los rasgos disfuncionales que presentan las personas altamente innovadoras y creativas. Solemos asociar esos terminos sólo con cosas positivas, pero parece que para en verdad romper el molde o explorar  "afuera de la caja" resulta indispensable tener una personalidad algo oscura.

Me acordé de este tema por la lloradera de Kanye West en redes sociales, y sus intentos, fracasados por supuesto, de contactar a grandes emprendedores, solo para pedirles la medio pendejadita de 53 millones de dólares.  Nunca he escuchado la música de ese señor, pero he leído que afirma ser un artista en extremo creativo, y que todos deberían apoyarlo.  Esta claro que es una de las personas más convencidas de toda la historia de la humanidad, y que presenta esos rasgos de irreverencia también importantes al momento de crear, pero  ¿Hasta que punto debemos ser así fantoches? puede que debamos tener un lado oscuro, pero creo que, como en todos los asuntos de la vida, debe haber un equilibrio, y queda claro que al señor West se le fue todo el peso para  el lado oscuro, el irreverente, el: "soy dios arrodíllense ante mi".

Psychoticism, a trait associated with dysfunctional characteristics,
is most closely linked to creativity. Although creative people are not 
necessarily psychotic, they may have the same cognitive tendency as 
psychotic people, for example, over-inclusive thinking. It has been
found that artists measure higher on psychoticism than non-artists
- Innovation and the ‘Dark Side’ of Personality -

Al momento de innovar y ser creativos, términos completamente magullados hoy en día, creo que debemos quitarnos esas ínfulas de grandeza, o podemos convertirnos en innovadores fastidiosos.

En últimas todos somos psicóticos, pues todos estamos en la capacidad de ser creativos, así que no tendría nada de raro que alguien que conozcamos también le de por pedirle ayuda financiera a Zuckerberg para pagar sus deudas.

lunes, 15 de febrero de 2016

Palo

En el fútbol, los palos emocionan a las hinchadas, pero actúan como una droga que nos produce una breve emoción , que termina al instante, justo cuando el metal del arco deja de vibrar después del balonazo.

"En el fútbol los casi no valen" es una frase obvia y cierta.  Casi ganar, casi empatar, casi clasificar, casi, casi, casi.  Preferible decir que algo no se logro a que casi lo logramos, preferible aceptar que no le dimos al palo sino que mandamos el balón por el aire a varios metros lejos del arco.

De todas formas creo que son más las veces que nos descachamos por completo que las que le damos al palo.  Es preferible fallar acertadamente que vivir a punta de palos.

miércoles, 10 de febrero de 2016

Bolsillos

Me gusta cuando las chaquetas tienen muchos bolsillos.  A veces cuando no hay una caneca cerca voy guardando basura,papeles que ya no me sirven para nada o el paquete vacío de alguna galguería, en ellos; los encuentro muy útiles para eso.

No concibo que diseñen camisas  y no le pongan ni un solo bolsillo.  Para mí eso es un complique, pues no tengo donde meter elementos de mi kit de guerra urbano como mi estuche de lentes, las gotas o el más importante de todos, mi mp3.  Al que se le ocurrió eso de no ponerle bolsillos a la ropa, fijo fue el mismo de  la tarada idea de cambiar la cremallera de los jeans por botones.

Algo muy bueno de los bolsillos es que cada quien los utiliza como le de la gana, recuerdo que en los descansos del colegio, un amigo, a veces  compraba tarde algo de comer en la cafetería y al momento de tener que entrar a clase nuevamente no tenía problema alguno en meterse una empanada en el bolsillo, por ejemplo, para irle dando mordiscos en el salón de clase.

Nada como aquellas ocasiones en que nos encontramos un billete o un dulce en uno de esos compartimientos, aquellos momentos son  de dicha y felicidad pura.

En la navidad pasada me regalaron una chaqueta que tiene muchos bolsillos y por eso pensé en este tema.  En un momento me imaginé una historia de un hombre que accede a diferentes dimensiones cada vez que mete la mano en un bolsillo diferente.  Larga vida a los bolsillos.

martes, 9 de febrero de 2016

Co/mpetencia/laboración

Carolina, una amiga, es una experta sabe mucho sobre mercadeo, Hizo un Máster en una universidad Europea y ha tomado diferentes cursos para reforzar sus conocimientos.  Hoy me contó que la semana pasada la llamaron para ofrecerle un trabajo.  Aunque ella sabe, en general, mucho sobre mercadeo , le pidieron que dictara un curso, salpicado con temas financieros, sobre el cuál no se siente muy fuerte.  

La persona que lo entrevistó se dio cuenta de esto, y como el grupo de personas a las que les tiene que dictar el curso es complicado, le dijo que prefería no exponerla a ese paredón, en otras palabras que no tiene intención alguna de "quemarla". A cambio le propuso que le recomendará a alguien que tuviera conocimiento sobre el tema , y que más bien luego miraban que otro curso podría dictar.   Carolina, en un principio, dudo en proponer a su "competencia" para el trabajo, pero al final decidió hacerlo, pues cree firmemente que colaborar es una de las claves para mejorar como persona  y profesional.

Todos queremos ser únicos y deseamos que no existiera ningún tipo de competencia, pero sabemos que es un ideal completamente utópico. Aun así, nos escondemos cuál cangrejo en su concha, y no compartimos nuestro conocimiento, pues creemos que la competencia anda, como loca, tras nuestros pasos, esperando el momento preciso para robar todas esas brillantes ideas que se nos ocurren, que más bien  son escasas.

Puede que esa actitud sea ego, no sé, es un término tan complicado que prefiero no tocarlo. El punto es que debemos dejar de pensar que la competencia sólo quiere acabarnos y más bien mirar de que forma podemos colaborar;  aceptar que no nos las sabemos todas, y que a veces es bueno dar un paso al lado y dejar que la competencia nos gane un cliente o un contrato.


Collaboration and entrepreneurial attitude, together with the network principles 
of Web 2.0 also constitute the basis of a new type of creative organization.
- Big Questions in Creativity 2013 -


lunes, 8 de febrero de 2016

Servicio al cliente

Una de las mayores ventajas que presentan las historias es que cuando alguna nos engancha, filtramos los detalles que esta nos da con nuestras propias experiencias y recuerdos; de ahí que logren generarnos fuertes emociones.

Hoy leí una historia y me acorde de esa ocasión en que mi dealer de perros calientes me dio una muestra de lo que es el servicio al cliente.  A veces me ataca un fuerte episodio de hambre cuando  llego de madrugada a la casa.  No sé por qué, pero el hambre a esas horas parece algo de otro mundo, y resulta mucho más violenta si se ha consumido licor.

Un día me paso eso, y entonces llamé al dealer a su celular pero me contesto otra persona, Esta me dijo que le podía hacer el pedido y que  él luego le decía al mensajero cual era. Pedí entonces lo de siempre, un combo perro, y a la media hora el hotdog-dealer llegó a mí casa con el pedido.

Me entregó el paquete en el cual sólo venía el perro y la gaseosa.  Le pregunte que si se había comido las papas en el camino, sonrió y me pregunto  "¿Lo pidió en combo?".  Le contesté que sí e intenté hacer un gesto de "Me extraña la pregunta" que creo no capto.  

Me dijo, "Hermano que pena, deme 15 minutos y le traigo las papas".  Cerré la puerta, y más o menos a los 20 minutos volvió a timbrar.  Me había conseguido las papas, pero las había comprado en El Corral.  no sé a esa hora a cual  habrá ido para conseguirlas, pero queda claro que mi hotdog-dealer tiene si sabe que significa el servicio al cliente. 

domingo, 7 de febrero de 2016

Cambio

El título de esta entrada es algo pretencioso, pues el significado que encierra la palabra cambio es muy complejo como para tratar de definirlo o hablar de el en tan solo 199 palabras.

"La mayoría de nosotros no cambiamos hasta que no tenemos otra opción, 
y las crisis son las que frecuentemente nos obligan a hacerlo.  Las crisis
 frecuentemente se resuelven a través de una nueva identidad y un nuevo 
propósito, bien sea el de una nación o el de un ser humano"

Eso  cuenta Rebecca Solnit, una de esas escritoras que vuelve migas mi rebanada de panen su libro "La Lejanía Cercana".

Todos deseamos el cambio o cambiar, pero nos aterra tremendamente experimentarlo.  A pesar del frecuente bombardeo de todo ese "porno motivacional" que nos habla de nuestro gusto por la zona de confort, que no vamos a obtener resultados nuevos  si continuamos actuando de la misma manera como lo hemos venido haciendo hasta el momento, etc. etc. etc. continuamos agarrándonos de ese supuesto orden en el que transcurren nuestras vidas.

Por eso, cada vez que conozco a alguien que le apuesta deliberadamente al cambio y que no espera las cachetadas de la vida para zambullirse en el, me pongo contento y lo celebro.

jueves, 4 de febrero de 2016

Sin querer queriendo

Así nos la pasamos por la vida, actuando sin querer pero queriendo.  El problema es que no nos damos cuenta.  Ojalá sólo fuera eso, es decir, que sólo fuera nuestra culpa y ya, que nuestros actos no involucraran a terceros.

Puede ser que usted, estimado lector, se considere como una de  las persona más buena vibra de toda la historia de la humanidad y piense que, en cuanto a derroche de buena actitud, solo lo sobrepasen personajes históricos como:  El Dalái Lama, la madre Teresa de Calcuta, Nelson Mandela, etc. Aún así con toda la paz y tranquilidad que usted supone que irradia y derrocha, de seguro existen personas que lo consideran un imbécil, y en otras ocasiones sus amigos o familiares también le darán ese calificativo, pues creerán que estuvo mal algo que usted hizo.

Hoy hablé con una amiga que se salió de una conversación grupal en WhatsApp.  Hasta ahí todo normal. Le pregunté que si se había aburrido del grupo y le conté que también estoy a punto de salirme, pues las conversación se ha convertido en puro derroche de ego, donde todos buscan (buscamos más bien) una palmadita en la espalda por lo "brillantes" y excelentes profesionales que se supone que somos.  Ella me dio la razón, y después me dijo que lo que más la había decepcionado era la indiferencia de las personas con respecto a algo que ella había escrito.

En ese momento llegó a mi cerebro la clásica  melodía tururuuu de la llamada en espera  pues era lógico que yo, sin saberlo, también había actuado indiferentemente.  De cierta forma intenté disculparme, pero a veces es mejor quedarse callado.  Después de mis escuetas palabras mi amiga me respondió: "Cada uno hace lo que le nace".

Su respuesta es un axioma de vida, pero yo lo complementaría de la siguiente manera:

"Cada uno hace lo que le nace, y a veces lo que hace, lo hace sin querer queriendo"

miércoles, 3 de febrero de 2016

Tracción

De las tres definiciones que la RAE le da a tracción, ninguna me convenció. Si me ponen a escoger una, me quedo con la que tiene relación con la física: 

“Esfuerzo a que está sometido un cuerpo por la acción de dos fuerzas opuestas que tienden a alargarlo.” 

Asocio la palabra tracción con movimiento y engranaje, con echar a andar algo. Ahora me doy cuenta que esa asociación de palabras aplica para otra de las definiciones:

“Sistema mecánico que aplica la potencia del motor a las ruedas del vehículo.”

No escogí esa porque tenía la ilusión de que la palabra tuviera un significado mucho más lírico, literario o poético; que me evocará algún recuerdo, en últimas que le diera de pleno a una emoción, y en eso creo que la imagen del cuerpo que se alarga por la acción de dos fuerzas opuestas lleva levemente la delantera.

Vivimos llenos de miedo porque nos machaca la cabeza el futuro que nunca llega. Por eso toda esa perorata (Que buena palabra esta, la voy a repetir mentalmente 10 veces, ya) de vivir en el presente, pues es uno de los pocos mecanismos con que contamos para hacerle frente al “tiempo que sitúa la acción, el proceso o el estado expresados por el verbo en un punto posterior al momento del habla” o lo que conocemos comúnmente como futuro.

El futuro es muy paradójico, pues no deberíamos pensar en él, pero si debemos esperarlo, y es ahí cuando entra en juego la tracción. Otro de los tantos problemas con el futuro es que no ocurre, como quisiéramos, inmediatamente, sino que se nutre de todo: el pasado, el presente, el más allá, el más acá, nuestros doppelganger, dimensiones paralelas, etc. es decir, podría definirse como: La tracción de infinitas variables.

En nuestra condición de humanos siempre vamos a pensar en el futuro. Los tiempos verbales nos definen, y resulta casi imposible cumplir con la consigna de únicamente ubicarnos en el presente. 

“El verbo tenía una estructura fibrosa y un sabor concentrado.
Traté de imaginarme uno muy rudimentario, que no fuera
capaz de expresar aún el pasado ni el futuro: sólo el presente,
e hice cábalas sobre ese momento de la historia, o de la prehistoria,
en el que de súbito apareció el tiempo o los tiempos, y fue posible
mirar hacia adelante y hacia atrás, hacia ayer y mañana.”
- Juan José Millás, el orden alfabético –

Como resulta imposible que todos nos convirtamos en monjes Zen y el futuro siempre nos enredará la cabeza al intentar visualizarlo y/o quererlo de inmediato, debemos confiar en la tracción. Esta solo consiste en tener fe de que todos los eventos y situaciones de nuestras vidas, no son más que esas fuerzas que nos alargan, estiran, doblan, apachurran, etc. y que sirven para engrasar toda esa maquinaria que nos lleva hacia adelante o bien hacia el futuro.

martes, 2 de febrero de 2016

Directora de municipio

Hace un par de semanas fui a cine.  Después de que la película terminó fui al baño y vi que un hombre le pidió a la mujer que lo acompañaba, que lo esperara mientras él también entraba al baño.  Ambos  coincidimos en la entrada. Luego de nuestra corta permanencia en ese lugar, me lo volví a encontrar en los lavamanos y ahora el hombre estaba hablando por teléfono; al parecer hablaba con su esposa o novia y le decía:"Si amor,  ¿no te dije? estaba en reunión con los directores de municipio (¿Existe ese cargo?) pero ya salí, ahorita nos vemos."  

Después de esto volví a ver al hombre en las escaleras eléctricas,  abrazando  y besando a la "Directora de Municipio"  con la que estaba en cine.

El señor que se inventa reuniones para ir a cine con la "otra" ni me va ni me viene, cada quien vera que hace o que no hace pero,  ¿cree usted, estimado lector, que la fidelidad ya está mandada a recoger y que es prácticamente imposible ser fiel?


lunes, 1 de febrero de 2016

Cambiar

El aeropuerto puede ser un sinónimo de "viaje", y también de "cambio",  pues al ser un lugar que nos permite viajar, valga la redundancia, a la vez nos invita a cambiar.  Uno nunca es el mismo después de haber visitado otro lugar y, al volver , luego de visitar otro país o ciudad, uno ha cambiado mucho o poco, dependiendo de la intensidad y emociones del viaje.

Como ya lo he dicho es un lugar cargado de emociones, sobre todo de ansiedad, tal vez es por eso que la mayoría de personas parecen ir de afán en estos lugares, pero nunca de tristeza pura, es decir, siempre estará revestida de nostalgia, al tener que partir o despedir a alguien, pero en el fondo sabemos que viajar es una terapia necesaria que le hará bien al viajero.

Tal vez las personas no es que vayan de afán, sino que caminan con determinación porque quieren montarse al avión lo más rápido posible, con fe de que en el instante en que pisen el aparato volador,  iniciarán un cambio.

"Deep down, people who travel are musicians 
or poets because they are looking for sounds."
- The Traveler of the century -