Ocurría en españa y el protagonista, un hombre de barba poblada, decide quedarse solo en su casa, a pesar de que su hermana le dijo que se fuera con ella y su familia a las islas canarias, pues su esposo trabaja con el ejército y los iban a reubicar allá con todas las comodidades del caso.
El hombre no deja de intercambiar mensajes con su hermana, y le dice que va a buscar la manera de llegar al lugar en el que ella se encuentra con su familia, pero al final hace lo que le da la gana y se queda solo en compañía de su gato y, claro, se le acaba la comida y debe salir a buscarla.
Como era de esperarse debe enfrentarse con uno que otro zombie. Además de eso como si el conflicto no fuera ya suficiente, los guionistas decidieron meter en la historia a unos malhechores rusos que iban en un barco y que se encuentran al hombre de barba cuando este intenta escapar en un bote por un río o lago.
Uno de los rusos habla inglés y es el que sirve de intérprete con el capitán del barco. En una de sus conversaciones le preguntan a qué se dedica, y el hombre de barba responde que es abogado. Luego de que el ruso tradujera la respuesta, le cuenta al protagonista que le dijo al capitán que era ingeniero. “A nadie le caen bien los abogados”, concluye.
El hombre de barba entabla una especie de amistad con el ruso, que resulta ser ucraniano. En una de sus conversaciones se entera de que sabe pilotear helicóptero. Le cuenta que él sabe en que lugar de un hospital hay uno, y que si le ayuda a escapar podrían dejar la ciudad y volar hastaa las islas Canarias.
El ruso decide hacerle caso y cuando por fin llegan al hospital se encuentran con un grupo de sobrevivientes, pero para poder llegar al helicóptero deben atravesar un parqueadero repleto de zombies.
Como era de esperarse el conflicto escala porque los rusos del barco llegan al hospital en busca de provisiones.
Para no extenderme, al final el hombre con barba y el ruso logran llegar al helicóptero y luego de tener problemas para prender los motores, la hélices por fin comienzan a girar y despegan. En la última escena cuando ya viajan hacia las islas canarias, recibe una llamada de su hermana: “Hola ya voy para allá”, le cuenta y la respuesta que recibe es la siguiente: “No no vengas para acá”, y ahí se corta la llamada.
Queda claro que los guionistas, además de estar aburridos, no tenían ni idea cómo terminar la película y eligieron ese final flojo. Me sentí como cuando uno lee una historia y utilizan ese truco barato en el que narrador cuenta que todo fue un sueño.
Si dan con esa película no la vean, están advertidos.
El ruso decide hacerle caso y cuando por fin llegan al hospital se encuentran con un grupo de sobrevivientes, pero para poder llegar al helicóptero deben atravesar un parqueadero repleto de zombies.
Como era de esperarse el conflicto escala porque los rusos del barco llegan al hospital en busca de provisiones.
Para no extenderme, al final el hombre con barba y el ruso logran llegar al helicóptero y luego de tener problemas para prender los motores, la hélices por fin comienzan a girar y despegan. En la última escena cuando ya viajan hacia las islas canarias, recibe una llamada de su hermana: “Hola ya voy para allá”, le cuenta y la respuesta que recibe es la siguiente: “No no vengas para acá”, y ahí se corta la llamada.
Queda claro que los guionistas, además de estar aburridos, no tenían ni idea cómo terminar la película y eligieron ese final flojo. Me sentí como cuando uno lee una historia y utilizan ese truco barato en el que narrador cuenta que todo fue un sueño.
Si dan con esa película no la vean, están advertidos.