En la universidad tuve un amigo de ascendencia alemana que es una muy buena persona; con el tuve me refiero a que simplemente perdimos contacto. Muchas veces nos toco hacer trabajos juntos y trasnochábamos en mí casa, razón por la cual en repetidas ocasiones se sentó a comer con mí familia.
Siempre que terminaba de comer, parecía que su plato no iba a necesitar ser lavado porque lo dejaba desocupado y a veces, hasta sin ningún rastro de salsa. En cierta ocasión, terminamos hablando sobre esa "conducta" , me imagino porque yo no quise tomar sopa o algo por el estilo. Él nos contó que el siempre dejaba el plato así de limpió, porque uno de sus abuelos vivió por un tiempo en un campo de concentración y siempre le inculcó que desperdiciar una migaja de comida, era una locura.
Para nosotros, una migaja puede que no marque la diferencia; pero esto puede cambiar de la noche a la mañana.