jueves, 28 de noviembre de 2019

Películas por partes

A veces veo algo de televisión antes de dormirme. Con Netflix soy más de series que de películas, y trato de seleccionar esa que cuentan con capítulos de no más de media hora, para no trasnochar. Las pocas veces en que decido ver una película la veo por tandas, es decir, comienzo a verla hasta que creo que es hora de dormir y la terminó de ver en los días siguientes. 

Así me paso con una que se llama Replicas en la que actúa Keanu Reeves. Creo que Reeves quedó muy marcado con el personaje de Matrix, y siempre que lo veo actuar muchas veces pienso: "ahí está Neo haciendo tal personaje", en fin. 

La película que vi trata sobre clonación e inteligencia artificial, y de cómo pasar la conciencia de un muerto a un robot. El personaje que interpreta Reeves es el de un científico que es brillante en su trabajo. 

No les voy a contar qué ocurre, pero hay un momento en la película en el que el personaje tiene que tomar una decisión muy difícil, y no recuerdo donde fue que leí, pero alguien dijo que en esos momentos es cuando uno se da cuenta de lo bien diseñado que está un personaje, es decir, cuando este se enfrenta a una situación que lo pone entre la espada y la pared, y por la manera en que actúa ante esa situación, aún sabiendo que cualquiera de los resultados que tiene a la mano no van a tener un final feliz. 

En el momento en el que, creo, ocurrió eso en la película me interesé mucho por la trama y por saber cómo el personaje iba a solucionar la situación, pues había mucha tensión y no se sabía que iba a pasar, pero justo en ese momento decidí dormirme, porque si no me iba a trasnochar. 

Al otro día, cuando llegué a la casa continué viendo la película, pero hubo algo, no sé exactamente qué, que me desanimó. Como que la tensión que habían creado los guionistas se fue al carajo y resolvieron el conflicto del personaje a la ligera, y al final terminé de ver, la película solo por saber qué iba a pasar. 

Como consumidor de historias uno es una pereza, pues creo que siempre estamos tras la búsqueda de esa historia perfecta, sin grietas narrativas, y siempre nos va a parecer que algo les falta o les sobra o, de pronto, lo que ocurre es que mi costumbre de ver películas por partes es lo que daña la experiencia.