viernes, 16 de enero de 2015

Turno 196 con canciones

Hoy tuve que ir a hacer una vuelta en el Supercade de la 30.  Me tocó el turno 196, y nuevamente enfrentarme a una de  esas pantallas con muchos números, que sólo me producen angustia.  En esos sistemas de atención, suelo pensar que por andar distraido voy a perder el turno.

La primera vez que la miré tenía los siguientes números: 160,87,25,32,86,9016 y 8026.  Me pregunté  ¿Si está funcionando esa vaina? De acuerdo a esos números,  me encontraba como mínimo a 36 y máximo a 8820 turnos de para ser atendido, cifras poco alentadoras.  Al instante caí en cuenta que habían diferentes secuencias de números de acuerdo al trámite a realizar.  Esto me tranquilizó un poco, aunque sabía que la espera iba a ser larga.

Una señora que, estaba  a un par de sillas de la mía, a la derecha, comenzó a hablar duro por telefono.  Le decía a otra mujer que si ya había tendido la ropa y calentado la comida, para que fulanito almorzara.  Una vez termino de darle órdenes, le dijo "pero descanse,  ¿no?, es mejor que descanse".  No entendí la ambiguedad de sus órdenes y dejé de ponerle atención a su conversación. 

Como estaba gritando, decidí entonces prender mi MP3, para pasar la espera a punta de música.

La tanda musical conenzó con In my Time of Dying, mi canción favorita de Led Zeppelin, la cual nunca adelanto cuando suena.

Después de esto sonó la versión unplugged De State of Love and Trust, con la voz de Eddie Vedder en perfecto estado y el feeling único de Dave Abbruzzese en la batería.

Una vez terminó la canción de Pearl Jam, Siguió  Semi-Charmed Life una de esas canciones que considero One-hit-wonders, sin ánimo de ofender o entrar en conclifto con los fans de  Third Eye Blind.

Moví la pierna derecha, y sin culpa presione el botón de pausa del mp3.  Me volví un ocho con unos papeles que tenía en la mano, mi libreta, un esfero, la chaqueta y una maleta y tuve que bajar la mirada para sacar el aparato del bolsillo y ponerle play nuevamente.  Mientras corregía mi movimiento lerdo, penséque preciso en este instante el tiempo de atención de los turnos iba a ser mucho más rápido y que el mio se iba a pasar.  Subo la mirada rápidamente, y me doy cuenta que apenas van en el 161.  Por lo menos para ese momento ya tenía claro que los números de turno por encima de 8000 no tenían nada que ver con el mío.

Pienso entonces medir cuanto es el tiempo de atención en minutos por turno, pero desecho la idea al instante por pereza de hacer cálculos y porque evidentemente  habría aumentado la angustia y tedio de mi espera.

El mp3, como suele ocurrir, se queda "pegado".  Vuelve a sonar state of love and trust.  La adelanto y sigue Try de John Mayer Trio, una buena canción de un muy buen disco, que cayó en mis manos por pura casualidad, un día que estaba en Tower Records quemando tiempo y lo tenían en uno de los puntos donde se podían escuchar hasta 5 artistas diferentes.  De Mayer sólo conocía esa canción floja de "Your body is  sonderland", obviamente su faceta más comercial.  Después de oir unos 10 segundos de cada canción del concierto, no dudé en comprarlo.

 Give your Heart Away del Magic Potion de los Black Keys fue la siguiente, de  un disco del cual extrañamente me aguanto todas las canciones.  

Smells like Teen Spirit es la siguiente y sobra hacerle introducciones a esta canción.  Una vez, en el colegio me compré una revista Circus, porque traía un artículo de Pearl Jam sobre el vs. y Otro de Nirvana sobre el Nevermind.  Cobain daba el significado de cada canción de ese disco, sobre esta dijo:

My generation's apathy.  I'm disgusted with it.  I'm disgusted with my own apathy too, 
for being spineless and not always standing up  against racism, sexism and all
thos other isms the counterculture has been whining about for years". 

Relacionado con ese movimiento Grunge le recomiendo, estimado lector, leer la novela No Alternative de William Dickerson.

 Jack Ruby fue la siguiente canción del Abandon de Deep Purple, un disco no tan bueno como el Purpendicular, pero donde se nota toda la frescura que Seteve Morse (Guitarra) le imprimió al grupo, luego de haber estado estancados por los líos con Ritchie Blackmore.

December.  Collective Soul.  Cuando escucho este grupo, siempre me acuerdo de cuando conocí los blogs y abrí el Zion Lost Child, Un evento que  parece ubicarse siglos atrás. 

Siguió What's it gonna be de Mr Big, que me gusta mucho por el intro en batería y el uso del bombo. También por el  final donde Paul Gilbert toca un solo endemoniado y el sonido de la canción va desapareciendo.  Esas canciones, sin un final concreto, me intrigan mucho, pues de alguna u otra forma deben tener un fin, uno que nunca escucharemos. 

Después Augesprochen de Annett Louisan, una monita alemana que canta muy chévere.

Siguió Orishas con Canto para Elewa y Chango. Un grupo que me acuerda a Mafe, otra antigua Bloguera que me presentó ese grupo , y el Parkway.

Under the Bridge.  A veces me gusta escuchar esta canción y en otras ocasiones me aburre completamente.  Ya está muy quemada.

Después sonó Fíjate bien.  Esta canción y otro par me gustan, y me acuerdan de esa época en la que le caí a Margarita.  Precisamente fue a un concierto de Juanes con ella.

 Otra vez el shuffle se trabó y repetí grupo y disco con Almost Human de Deep Purple.

Para ese momento ya iban en el turno 193 y miraba la pantalla casi sin pestañear.

Así fue hasta el 195 donde sonó Been Away too Long del King Animal de Soundgarden, un disco que todavía no me convence.

Se acabó esta canción apagué el mp3 y por fin salió el 196 en pantalla.  Dos horas y 10 minutos esperando ese momento para ir al módulo 23 y hacer el trámite en menos de 5 minutos.