viernes, 9 de septiembre de 2016

Plantarse

Hasta hace unos momentos está entrada era solo un borrador  con ese título: "Plantarse".  Le di clic para averiguar que había comenzado a escribir y estaba en blanco.   ¿Qué habré pensado ese día en que titulé esa entrada que solo hasta hoy cobra vida?

Lo único que se me viene a la cabeza en estos momentos es que plantarse hace referencia a pelear por algo, tal vez es la traducción y resumen, en una sola palabra, de la frase gringa: Stand your ground.  También se me viene a la cabeza la palabra inamovible.

Pues si, plantarse es eso, adoptar una postura inamovible con respecto a algo, una idea, un proyecto, lo que sea y defenderlo con cualquier herramienta,medio, método que se tenga al alcance.  

Plantarse fue lo que hizo Bill Watterson, el creador de Calvin y Hobbes. Después de brindarle al mundo semejante creación decidió que nunca la iba a comercializar y, literalmente, se desapareció.  En otras palabras se plantó en su decisión y particular punto de vista y hecho raíces.

Echar raíces es otro componente fundamental del acto de plantarse, pues si alguien se planta ligeramente, con duda, sobre la superficie,  cualquier cosa lo desplanta, lo arranca de raíz y hasta ahí llegó el intento. 

Plantarse es entonces otro de esos tantos artes que nos hacen falta dominar.