viernes, 15 de agosto de 2014

Primer Café

Creo, como ya lo escribí alguna vez, que no funciono durante el día si no me tomo una taza de café en la mañana, en cualquiera de sus presentaciones  (entiéndase mañana el periodo comprendido entre las 4 y 12 a.m); ya después pueden venir las que quieran, pero ninguna desbanca a la primera, aunque trato que no sean más de tres en un mismo día.  En la universidad hubo un semestre en el  que tomé tinto de forma empedernida, y paré mi rutina, en ocasiones de más de tres tintos diarios, porque sentí que me estaba acelerando.  De pronto esa es la razón por la cual tomar café no me quita el sueño.

Primer Café 15-08-2014
Hace poco leí una colección de cuentos de escritores españoles, que tenía como tema principal "La primera vez" abarcando esto en un concepto amplio, y no únicamente en el plano sexual.  Lo compré porque uno de los cuentos era de juan josé Millás y él es mi escritor favorito.

Y es que las actividades que repetimos  durante los dias, semanas, meses, años que tenemos de vida, solo basta modificarles algo ligeramente para que se conviertan en una "primera vez".  Como  bien lo afirmó un escritor en este libro, el único evento que tiene una única forma de ocurrir  la primera vez, es la muerte (vuelve y juega).

Para mí, el ritual de tomarme el primer café del día siempre es una primera vez, pues siempre lo siento distinto. Es una especie de liturgia personal, en la cual mi cabeza funciona a mil, y  bota  miles de ideas y pensamientos.  ¿Qué evento fue su primera vez el día de hoy, estimado lector?.