martes, 15 de octubre de 2013

Habilidad

En el bus que me monté hoy para devolverme a mi casa iban embutidas como sardinas, alrededor de 3 millones de personas.  Me subí por la parte de atrás, como no suelo hacerlo, solo porque el conductor me indicó que así lo hiciera.  Pase  mi billetico de $2000  y después deun tiempo una señora me devolvió 100 pesos.  

Los tomé resignado pero he de dejar constancia que es la primera vez que falla la "cadena colaborativa del pasaje" en un bus.  Finalmente creo que me equivoqué de vueltas  porque después de un rato pasaron otras que llegaron  a las manos de una mujer que estaba al lado mio y nadie las reclamó.

En resumidas cuentas el pasaje me costo $1900; pero bueno  ¿qué se le va a hacer? cuando me montó en el transporte público de esta caótica ciudad trato de que nada ni nadie me fastidie el viaje, así que decidí no pelear por las vueltas; además me habría tocado gritarle al conductor y era muy poco probable que me pidiera disculpas y enviara nuevamente unas vueltas, en fin.

Después de eso, me puse los audífonos, y el dios del shuffle afortunadamente me dio una buena tanda de canciones.  En medio de mis disertaciones sobre cualquier tema, me di cuenta que la señora que iba a mi lado, también de pie, iba durmiendo.  Estaba agarrada fuertemente de una de las varillas del bus, y se mecía con cada frenada y arrancada, y en medio de la incomodidad se veía muy tranquila. 

  ¿En cuantos viajes de bus desarrolla uno esa habilidad? A mi la verdad me queda muy difícil, pues soy pésimo para dormir en los buses.  A diferencia de muchas personas que afirman tener una especie de reloj en el cerebro que les indica cuando deben despertarse para bajarse justo donde deben hacerlo; yo no poseo tal habilidad.

Me he quedado dos veces completamente dormido en un bus: en la primera me desperté cuando el bus ya iba en dirección contraria y me había pasado un montón de cuadras. En la segunda, cerré los ojos dizque solo para descansar y me pase 60 cuadras, pero bueno, nadie le quita lo dormido a uno, y dormir en bus tiene su particularidad, al igual que dormir en cine.

Espero algún día poder desarrollar la habilidad de dormir en los buses bien sea cómodamente sentado o de pie.