viernes, 22 de julio de 2022

Me dejo recomendar

No me gusta recomendar libros, pero si me dejo recomendar libros de personas que sé, les gusta leer igual o más que a mí.

Supone uno que los libreros deberían ser esas personas a las que me refiero, pero siempre me ha ido mal con las recomendaciones de un par de cierta librería que, siento,  miran como por encima del hombro a quienes hojean libros. 

uno de ellos me recomendó On the road de Jac Kerouac que, se supone, es un clásico, pero lo detesté y sufrí mucho por acabarlo, claro está que fue en esa época en la que tenía como regla terminar todo libro que comenzaba.

Meses después otro me recomendó El Señor que amaba a los perros de Leonardo Padura, del que muchas personas hablan maravillas, pero que a mí por una u otra razón no me enganchó. Recuerdo que uno de los motivos fue que me pareció muy extenso y que le sobraban unas 200 páginas, pero ¿quién soy yo para dictaminar eso?, en fin.

Otro que tampocó me enganchó fue HHhH de Laurent Binet, un libro sobre la segunda guerra mundial que habla sobre la operación antropoide en la que unos comandos checoslovacos entrenados en Inglaterra aterrizan en paracaídas en 1941,en la ocupada Checoslovaquia , para asesinar a Reinhard Heydrich, un alto oficial Nazi. Recuerdo muy poco la novela, pero no sé por qué no me gustó en ese momento, si la trama se ve buenísima.

Me imagino que pasa lo de siempre que a veces uno llega a los libros o ellos llegan a uno en un momento inadecuado.

Ahora, por ejemplo, leo novela de Ajedrez de Stefan Zweig, por recomendación de una amiga que lee como si no fuera a haber un mañana, y lo que llevo del libro me ha gustado.