domingo, 22 de septiembre de 2013

Escritorio

Hace un momento estaba buscando un documento que empecé a escribir hace ya más de un mes, pues pensaba terminarlo; ya no recuerdo porqué no lo concluí en aquella ocasión.  Lo que si recuerdo es que en mi libreta de apuntes varios la página en donde estaba anotada la idea principal del mismo, quedaron volando ideas adicionales , las cuales no alcancé a desarrollar.

Sigo creyendo firmemente que a veces es mejor dejar respirar las cosas. Con esto  no solo me refiero a escritos, sino cualquier tipo de evento: relaciones, situaciones, proyectos, amistades, etc. 

A veces en cierto momento del tiempo uno no está viendo bien todo el panorama, entonces, como dicen, es mejor darse un vuelto y llenarse de nuevas ideas para volver a  enfrentarse de nuevo y con toda a la situación.  Haga de cuenta que es como cuando se juega algún juego de video donde usted  tiene que matar a un monstruo principal; pero las estadísticas de su personaje: armadura, vida, fuerza, agilidad, don de gentes (¡ja! esta sería una berriondera que existiera) no le alcanzan para derrotarlo, entonces usted se da un vuelto, mata un par de bichos y  regresa para darle por la cabeza al monstruo que no había podido derrotar.

Pues bueno, comencé la búsqueda de mi escrito olvidado por el escritorio del computador.  "El escritorio" debería ser la papelera de reciclaje, pues casi siempre se guardan en el mismo archivos que nunca se van a utilizar o que finalmente se  van a borrar; pues uno, la verdad,  se toma el tiempo de guardar los archivos realmente importantes  en la carpeta y ruta indicada. Debería existir algún comando que le saque a uno un  cuadro de dialogo al momento de  guardar algo en el escritorio, diga usted algo como " ¿Está seguro que este archivo no es basura?".

Entonces, en medio de la búsqueda que resulto totalmente infructuosa, me encontré con fotos, pdfs, una carta a la EPS, una carpeta con el nombre "archivos de instalación" vaya usted a saber de que programa, otra que la nombre "Deutsch I", y la que más me llamo la atención "Nueva Carpeta ".

Algo que siempre hago al guardar archivos, sin importar si son o no basura, es darles un nombre (créame que trate de buscar mi escrito por un posible título de lo que trata, pero no me funcionó la memoria); así que una carpeta en el escritorio sin ningún nombre haciendo referencia a algo me pareció interesante y llegue a pensar que por X o Y motivo ahí estaba el escrito. 

Después de dar  el doble clic más rápido del oeste se abrió la ventana y no había nada dentro de la carpeta. 

Pienso seguir buscando el artículo, pero me quedé pensando,  ¿para que creé esa carpeta?   ¿donde quedaron los archivos que iba a guardar en esa carpeta?  ¿fueron realmente importantes en su momento y están en "Mis documentos"?  ¿Iba a contener esa carpeta mi novela para romper el piso (ground breaking novel)?.

Finalmente la borré y me puse a escribir esto, mañana buscaré el documento y lo terminaré. Si no lo encuentro me figuró volver a escribirlo; un buen ejercicio para la memoria pues debo recordar muchos detalles de la conversación que escuché en dicha ocasión.