domingo, 30 de diciembre de 2018

La loca de la casa

El cuerpo la casa; la loca, la cabeza.

La Loca de la casa es un libro de Rosa Montero, una escritora española que conocí gracias a Millás. Supe acerca de Millás por su libro de Articuentos completos, que compré a la ciega en una feria del libro, luego de leer un pasaje que me hizo reír mucho. En un principio, no sé por qué, pensé que solo escribía columnas, pero luego me enteré de que también escribía novelas. Desde ahí comencé a devorar toda su obra, junto con sus columnas de el diario El País.

Un día decidí ver quiénes eran los otros columnistas de ese diario y entre ellos me encontré a Rosa Montero y Javier Marías. Leí algunas columnas de Montero y me encantaron, busqué sus novelas y la primera que leí fue El peso del corazón, la segunda de la saga de la detective Bruna Husky. Me encantó. Luego leí la Ridícula idea de no volver a verte, La vida desnuda, un compendio de sus artículos, y también me parecieron increíbles. Me gusta mucho como escribe Rosa Montero, la forma en que narra y ve la vida; le deseo larga vida.

Hoy terminé un libro, y mañana, como vengo haciendo desde hace un par de años, pienso cerrar este dedicando unas horas del día a leer. El libro que había escogido para mi ritual de fin de año había sido la Loca de la Casa, que no es una novela, sino un texto en el que la escritora española habla acerca de su profesión, de qué significa escribir para ella, la fantasía, en fin, el arte de crear.

Ayer lo comencé a leer en la madrugada y, como lo esperaba, me gusto, pero hoy decidí, con ayuda de la cabeza que esta loca, cambiar esa lectura por otra, pues quiero sumergirme en una historia, leer novela pura y dura. 

No pienso cambiar de autora, y si mi cabeza no tiene otro capricho de último momento, creo que voy a leer Historia del Rey Transparente, de la que un lector, hace poco, le dio las gracias a la escritora por Twitter, diciéndole que esa novela había marcado un antes y un después en su vida.