miércoles, 11 de marzo de 2015

El de al Lado


 ¿Cuántas personas diferentes, sin contar a amigos, parientes o conocidos, tenemos justo al lado en un día? Me imagino que la cifra varía dependiendo de la actividad de cada persona y el sector donde pase la mayor parte del tiempo, pero supongo que como mínimo deben ser alrededor de 10.



Lo intrigante y que nunca sabremos es  ¿Qué papel va o podría llegar a jugar esa persona en nuestras vidas?  Un jefe que tuvo mi hermana conoció a su esposa en una sala de cine, en la cual coincidencialmente ambos fueron solos y quedaron sentados uno al lado del otro.  No sé por qué le tenemos una aversión tremenda a ir a cine solos.  Yo lo he hecho cuando tengo muchas ganas de ver una película que no parece interesarle a ningún familiar o amigo.  Así fue, por ejemplo, cuando estrenaron Guerra Mundial Z.  No  encontré con quien verla y fui sólo.  No conocí al amor de mi vida, pero me divertí.



En la medida de lo posible, así el de al lado no vaya a jugar ningún papel importante en nuestras vidas, creo que lo mejor es sonreírle sinceramente.  No se trata de tener cara de ponqué todo el tiempo, con una única sonrisa creo que basta, dado el caso que uno se enrede, en una conversación, con el extraño.



Pero sonreír no cuesta nada y puede servir de a mucho; sobre todo si el de al lado resulta ser un psicópata, que ese día decidió apuñalar a todo aquel que tuviera al lado y no le sonriera, por ejemplo.