martes, 22 de febrero de 2022

Desnudarse

Hace poco leí un artículo de la escritora Mariana Perezagua titulado Amar al monstruo.

En él hablaba del maltrato de su padre, y cuenta que uno de los primeros recuerdos que la marcaron era como la sujetaba de las piernas para bañarla, mientras ella retorcía su pequeño cuerpo, el jabón escurría y le entraba a los ojos.

Ahora intento volver a leerlo, pero ya no tengo acceso, pues me sale un aviso que dice que debo pagar para suscribirme. En fin, una lástima porque ese día lo leí de afán y prometí volverlo a leer, para digerirlo con más calma.

Ahora, gracias a que a veces mi mente es un zaperoco de ideas, ya no recuerdo si fue en el mismo artículo, o en una publicación que hizo en alguna de sus redes, que la escritora se refirió al mismo y habló de la necesidad y ventajas de desnudarse con la escritura.

Se trata de no dejar nada en el tintero, de exponerlo todo, lo bueno y lo malo, pero sobre todo lo último, es decir, mostrar esas grietas y rincones oscuros de nuestra personalidad que siempre queremos ocultar, pero que al final son los que nos hacen más humanos.

En el prefacio de los diarios de John Cheever, uno de sus hijos toca el concepto de otra manera. Dice que algo que siempre intentó su padre en su trabajo como escritor fue mostrar a los demás que sus pensamientos no eran impensables.

De esa forma Cheever llego a un acuerdo con su bisexualidad, y aunque logró dejar la bebida, la vida en sí era un problema para el escritor.

La manera en que buscaba la solución era articular, de alguna manera lo que le ocurría; convertir cualquier asunto que ocupaba su mente en una historia.

To write well, to write passionately, to be less inhibited, to be warmer, to be more self-critical, to recognize the power of as well as the force of lust, to write, to love.

- The Journals of John Cheever -

No hay comentarios: